Sentada estoy mirando el vacío y con una tenue mirada de hastío a cada momento me pregunto, ¿Hacia dónde ir ahora?

Ahora que el día se escabulle entre mis antiguas manos y el silencio aparece en mi boca abrigándome un poco me pregunto de nuevo, ¿Hacia dónde ir ahora?

¿Hacia dónde ir ahora?

¿Hacia dónde ir ahora?


jueves, 28 de abril de 2011

Entre alamos

alamos, originalmente cargada por Xesul.

viernes, 25 de marzo de 2011

Huellas...


Huellas..., originalmente cargada por Xesul.
"Todo lo que hagas en la vida dejará huellas" (Paulo Coelho)

domingo, 13 de marzo de 2011

Ocaso


Ocaso, originalmente cargada por Xesul.

Sombra, trémula sombra de las voces.
Estatuas derribadas en la luna.
¿Cómo decir, camelia,
la menos flor entre las flores,
cómo decir tus blancas geometrías?

¿Cómo decir, oh Sueño, tu silencio en voces?


Octavio Paz

Lagrimas de nieve


Lagrimas de nieve, originalmente cargada por Xesul.

Desde la nieve convertida en agua,
desde el sucio periódico sin dueño,
desde la niebla, desde el tren hundido
con sus cientos de manos que buscan asidero;
desde la fantasía de los anuncios luminosos
y el ruido sin piedad de las bombas de incendio;
desde la noche que nos cae encima
—losa de cielo sin estrellas—;
desde cada momento perdido entre las calles
donde todos los solos del mundo pasan desconocidos;
desde el árbol sin hojas y el camino sin gente,
otra vez, como ayer, como mañana,
acaso ya como todos los días que vendrán, si es que vienen,
entro al silencio.

jueves, 3 de marzo de 2011

La Boca de la Pesca


La Boca de la Pesca - Panoramica, originalmente cargada por Xesul.

Si al franquear una montaña en la direccion de una estrella, el viajero se deja absorver demasiado por los problemas de la escalada, se ariesga a olvidar cual es la estrella que lo guia.

( Antoine de Saint-Exupery)

miércoles, 2 de febrero de 2011

El reposo del cazador


El reposo del cazador, originalmente cargada por Xesul.
El reposo del cazador
No son más silenciosos los espejos
ni más furtiva el alba aventurera;
eres, bajo la luna, esa pantera
que nos es dado divisar de lejos.
Por obra indescifrable de un decreto
divino, te buscamos vanamente;
más remoto que el Ganges y el poniente,
tuya es la soledad, tuyo el secreto.
Tu lomo condesciende a la morosa
caricia de mi mano. Has admitido,
desde esa eternidad que ya es olvido,
el amor de la mano recelosa.
En otro tiempo estás. Eres el dueño
de un ámbito cerrado como un sueño.


Jorge Luis Borges